lunes, 19 de junio de 2017

CORPUS CHRISTI EN TÁBARA

La fiesta surgió en la Edad Media, cuando en 1208 la religiosa Juliana de Cornillon promueve la idea de celebrar una festividad en honor al Cuerpo y la Sangre de Cristo presente en la Eucaristía. Así, se celebra por primera vez en 1246 en la diócesis de Lieja (Bélgica).
En el año 1263, mientras un sacerdote celebraba la misa en la iglesia de la localidad de Bolsena (Italia), al romper la Hostia consagrada brotó sangre, según la tradición (La ciencia ha tratado de explicar este suceso atribuyéndolo a la probable presencia en el pan del pigmento rojo prodigiosina segregado por la bacteria Serratia marcescens). Este hecho, muy difundido y celebrado, dio un impulso definitivo al establecimiento como fiesta litúrgica del Corpus Christi. Fue instituida el 8 de septiembre de 1264 por el papa Urbano IV, mediante la bula Transiturus hoc mundo. A Santo Tomás de Aquino se le encargó preparar los textos para el Oficio y Misa propia del día, que incluye himnos y secuencias, como Pange Lingua (y su parte final Tantum Ergo), Lauda Sion, Panis angelicus, Adoro te devote o Verbum Supernum Prodiens.
En el Concilio de Vienne de 1311, Clemente V dará las normas para regular el cortejo procesional en el interior de los templos e incluso indicará el lugar que deberán ocupar las autoridades que quisieran añadirse al desfile.
En el año 1316, Juan XXII introduce la Octava con exposición del Santísimo Sacramento. Pero el gran espaldarazo vendrá dado por el papa Nicolás V, cuando en la festividad del Corpus Christi del año 1447, sale procesionalmente con la Hostia Santa por las calles de Roma.
En muchos lugares es una fiesta de especial relevancia. En España existe el dicho popular: Tres jueves hay en el año que relucen más que el sol: Jueves Santo, Corpus Christi y el día de la Ascensión, lo que da idea del arraigo de esta fiesta.
Las celebraciones del Corpus suelen incluir una procesión en la que el mismo Cuerpo de Cristo se exhibe en una custodia.

 Detalle de los enseres de la Danza a los pies del altar
 El retablo mayor de la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de Tábara
 Seis de nuestros danzantes, el resto, es decir, los otros dos ejercían de monaguillos



 Momentos de la consagración realizados por nuestro párroco Carlos Hernández
 Colocación de la hostia en la custodia para procesionar
Comienzo de la Procesión del Corpus Christi en Tábara, este año no hemos tenido niños que comulgasen, pero si que ha habido dos que han querido acompañarnos en la procesión: Untzue y Sergio, descendientes del pueblo, además a estos se han unido otros niños que han ido esparciendo pétalos de flores durante todo el recorrido de la procesión
Durante la homilía y por el fuerte calor reinante, uno de nuestros danzantes, Javier, se ha mareado y el pobrecillo no ha podido salir a escena, después de haber estado ensayando para la ocasión, por lo tanto se ha comenzado a danzar con solamente siete danzantes, y en este momento carecemos de Birria.
Sobre estas líneas danzando el lazo Señor Mío Jesucristo.






Subiendo la C/ La Puebla, de camino hacia el primero de los altares expuestos y después de haber danzado el lazo Las Vuelticas.

El primero de los altares donde se realiza la parada para adorar al Santísimo y donde se colocan los niños nacidos durante el último año, para que sean bendecidos, según la tradición tabaresa.
 Colocados los danzantes esperando para reanudar la marcha de la procesión.

El típico apelotonamiento de la gente en torno al altar, para sobre todo poder observar a los niños.
Esperando en la Plaza Sol para danzar otro lazo: Las Calles de Roma
En este punto y faltándonos un danzante, Alejandra Jorge se ofreció para cubrir el puesto vacante y a partir de ese momento ya teníamos cuadrilla completa (muchas gracias) y así todo es mucho más fácil.









El segundo de los altares montado en la Plaza Santa Rosa, donde había dos niños más

Un lazo más se danzó en la Plaza Santa Rosa, en este caso La Verde







Por último y como suele ser habitual rematamos nuestra participación con el lazo del Veinticinco, ofrecido a todos los presentes
Los niños de Comunión y los acompañantes que se unieron, acabando de esparcir los pétalos de flores.







 Finalización de la Procesión
Al final y como es costumbre nos hacemos la foto de grupo.
Unai García, Lucía Martín, Ana de la Prieta, Claudia Jorge, Celia Casado, Celia Fresno, Naiara García, Tamborilero Carlos Fresno.
En la foto faltan Javier de la Prieta, que el pobrecillo se mostró indispuesto, por un golpe de calor y por el va este reportaje y Alejandra Jorge que nos echó una mano y desde aquí queremos darle infinitas gracias.
Muchas gracias a Tere por el reportaje fotográfico y a todos los asistentes a la Procesión por aguantar semejante sol de justicia.